Revisando libros y revistas antiguas, maravillosa y entretenida costumbre, me encontré con unos escritos del filósofo chino Lin Yutang, fallecido en Marzo de 1976 en Taiwan los que siempre son un verdadero placer releer y por su atingencia con las personas que ya hemos pasado los sesenta años, he decidido compartirlos, por su simpleza y especialmente, por su utilidad, ya que contempla todos los ámbitos de nuestra vida. Empieza sus sugerencias de vida de la siguiente manera:
- Tú ya no tienes muchos años para vivir y además no podrás llevarte nada cuando te vayas, por lo cual debes ser ahorrativo, pero sin sacrificar tu bienestar.
- Gasta el dinero que deba ser gastado, disfruta lo que debe ser disfrutado y dona lo que sea posible.
- No te preocupes por lo que pasará cuando te hayas ido, porque cuando te vuelvas polvo, no sentirás si te alaban o te critican, si te visitan en el cementerio o simplemente, si te olvidan.
- El tiempo para disfrutar la vida es este momento, y los bienes que tan difícilmente ganaste debes gozarlos.
- No te preocupes mucho por tus hijos, porque ellos tendrán su propio destino y encontrarán su propio camino.
- Cuida en especial a tus nietos, ámalos, consiéntelos, y también trata de disfrutarlos mientras puedas.
- La vida debe tener más cosas que trabajar desde la cuna hasta la tumba.
- Despiértate diariamente a disfrutar un día mas de vida, sin peleas con nadie ni con rencores.
- No esperes mucho de tus hijos.
- Los hijos, aunque se preocupen de sus padres, también estarán continuamente ocupados con sus trabajos, sus compromisos y con su propia vida.
- Muchos hijos que no se preocupan de sus padres, pelearán por sus bienes aún cuando estén vivos y desearán que pronto dejen esta vida para poder heredar sus propiedades y riqueza.
- Si ya tienes 65 años o más, no intercambies tu salud por riqueza trabajando en exceso, ya que estarás cavando tu temprana sepultura.
- De mil hectáreas sembradas de arroz, sólo puedes consumir 1 taza al día y de mil mansiones, sólo necesitas un espacio de 8 metros cuadrados para descansar en las noches, así que, si tienes alimento y algo de dinero para tus necesidades, no necesitas más.
- Trata de vivir feliz, pues solo tienes una vida.
- No te compares con otros midiendo tu fama, tu dinero o tu estatus social, preocúpate que tus hijos logren felicidad, salud y calidad de vida.
- Acepta las cosas que no puedes cambiar, pues si te preocupas demasiado, puedes estropear tu salud.
- Crea tu propio bienestar y encuentra tu propia felicidad, haciendo cosas que te diviertan y alegren diariamente.
- Teniendo buen ánimo, la enfermedad se curará, pero teniendo un espíritu alegre, la enfermedad se curará más rápido o nunca se acercará.
- Nunca te fijes en las apariencias, porque esta cambia con el tiempo
- Busca si lo deseas, a alguien que te valore como persona, y si no la hallas, disfruta tu soledad que es mucho mejor que una mala compañía.
- No busques la persona perfecta porque ésta no existe.
Dejo hasta acá los sabios consejos del filósofo chino, porque que el resto lo debemos descubrir por nosotros mismos, ya que mal que mal, ya peinamos canas….
José Manuel Godoy Leiva – Abogado