30 de Marzo del 2025.- La reciente negativa de una Isapre chilena para otorgar cobertura a un rugbista de alto rendimiento por considerar su disciplina como “riesgosa” puso en el debate público la percepción sobre los deportes de contacto. Estas disciplinas, como el rugby, han sido históricamente reconocidas por su exigencia física. Aunque su valor va mucho más allá del riesgo de lesiones.
Diversos estudios han demostrado que los deportes de contacto ofrecen beneficios significativos tanto a nivel físico como mental. En el caso del rugby, su práctica mejora la resistencia cardiovascular, fortalece la musculatura y contribuye al desarrollo de habilidades como la coordinación, el equilibrio y la agilidad.
En el ámbito psicológico, fomenta la concentración, la disciplina y la autoconfianza. Además, su estructura basada en el trabajo en equipo y el respeto por el adversario refuerza valores esenciales que trascienden la cancha.
Más allá de sus ventajas individuales, estos deportes promueven principios fundamentales como la perseverancia, el compromiso y la resiliencia. El rugby, en específico, es reconocido por su capacidad de formar carácter y generar un sentido de comunidad en quienes lo practican. Además, como otros deportes de contacto, es altamente efectivo para reducir el estrés y mejorar la salud mental.
Equipos de todo el mundo han utilizado esta disciplina como una herramienta de integración social, ayudando a jóvenes a desarrollar habilidades interpersonales y a encontrar un espacio de crecimiento y superación. Y que es desde una perspectiva de salud pública, los deportes de contacto también juegan un rol fundamental.
En este contexto, la decisión de restringir la cobertura de salud a este tipo de deportes ignora el impacto positivo de estas disciplinas en la sociedad. Lejos de ser actividades de riesgo que deben ser desincentivadas, son herramientas de desarrollo personal, integración y bienestar físico y mental.
Es necesario que las políticas públicas y las instituciones de salud reconozcan la importancia de fomentar la práctica deportiva en todas sus formas. Que se garantice la igualdad de condiciones y acceso a la cobertura médica para todos los atletas, sin distinción de la disciplina que practiquen.
Frano Giakoni, director de carrera de entrenador Deportivo Universidad Andrés Bello